Te veo y otras miradas sin vida. Fernando Codina

Buenas noches, lectores empedernidos 💀👻

Octubre nos trae una fecha muy señalada, Halloween. ¿A quién no le gustaría acompañar ese día con una buena lectura? Por eso hoy estoy aquí con la reseña de este libro: Te veo y otras miradas sin vida del autor Fernando Codina. Creo que ya os habéis dado cuenta. ¡Sí, es otra publicación de la editorial Wave Books! Pero en este caso, del sello Wave Blue; sello que publica antologías de relatos de los géneros publicados de un autor o varios autores.

¿Leemos la sinopsis?

Atentos, os lo diremos una sola vez: tened cuidado con las miradas, con esos ojos que os observan, pues ellos os guiarán por un camino con relatos de distintos géneros, historias en las que todo es posible. Y esos ojos, amigos, lo ven todo... y tú eres la imagen que más busca. Íncubos y súcubos, mujeres pantera y hombres lobos, brujos y chamanes, asesinos, mutantes, muertos que caminan, voces y espejismos desde otro lado... reflejos de miradas.

Demasiadas miradas, y todas ellas ya sin vida. 

Lo siento. En mis reseñas no me gusta revelar más de lo necesario. Aunque en este caso, tengo que hacerlo. Porque cuando comencé a leer este libro de relatos no pensé que la nota del autor, ya me dejase con la boca abierta. Es por ese motivo, que me veo en la necesidad y en la obligación de compartir algunos extractos de ella:

<<Nadie es tan bueno como él mismo piensa, ni tan canalla como los demás creen. Y supongo que eso es algo que también puedes aplicarme a mí, o a ti. Hay casi tantos tipos de miedos, como personas que los sufren… y, curiosamente, a todas ellas, «su» miedo les parece único, especial, y al mismo tiempo, es algo que los permite definirse con respecto a los demás. >>

<<Al miedo puedes plantarle cara, con más o menos fortuna, y quizás con algo de ayuda… y muchas veces responde a experiencias vividas en nuestra infancia, o grabadas en nuestras células por la memoria de la especie. Pero el terror es otra cosa. Es un sentimiento más visceral, más oscuro, más profundo. Es algo que te impide respirar, actuar, reaccionar. Y de ambas cosas encontraras mucho en esta colección de historias. Has sido invitado a recorrer mis mundos de tinta roja y negra.>>

<No busques, por lo tanto, nada de bondad, o de esperanza>

No me preguntéis el por qué de mi admiración por esta introducción. Simplemente, su sinceridad, su sencillez y su crudeza me dejaron sin palabras. A esta maravillosa presentación le siguen 22 relatos, y como no podía ser menos, cada uno de ellos cuenta con otra “curiosa” y breve introducción. Véase aquí un ejemplo:

<<Todo el mundo sabía, en la pequeña ciudad, que era mejor no acercarse al umbral de esa casa, que pasaban «cosas raras» a quien traspasaba el jardín de cipreses y encinas, de rosales retorcidos, el camino de losas negras y blancas, o blancas y negras, las verjas de forja, retorcidas y ominosas, las fronteras de aquella casa extraña, oscura, que se alzaba entre la estación y el cementerio, entre los vapores del pantano y la nada de la jara. Todo el mundo lo sabía, pero ellos no…>>

Apenas se nota que estos dos detalles me han encantado, ¿verdad? 😲 😏

Continuemos. La muerte, las miradas de la misma, son el nexo entre los veintidós relatos. Eso queda muy claro en el título, pero va más allá... Estamos acostumbrados a leer misterio y terror, yo la primera. Escenas que nos hacen temblar y sugestionarnos, pero, al fin y al cabo, esos lugares no los conozco y esas situaciones no me han pasado. Sin embargo, Fernando Codina me muestra lugares por los que paseo a menudo, me pone en situaciones comunes y habituales que dan un giro de 180 grados terrorífico. Eso sí es miedo, no el susto del momento, si no la inseguridad y la sugestión del después. Esa sensación de inseguridad a tu alrededor.

En estos relatos nos encontraremos con fantasmas del pasado, demonios, sucubos, hombres lobo, muertes y desapariciones extrañas, personas normales con gustos algo peculiares e ilegales, etcétera. Una mezcla de géneros muy atractiva, con cierto humor negro como guinda del pastel. Un lenguaje sencillo, sincero y directo. Digo sincero, porque da la sensación que el autor, te lo está contando directamente a ti, una macabra reunión, con una calma que pone los pelos de punta a cualquiera.

Una lectura ágil, emocionante y sorprendente, Wave la vuelve a liar ☝️😁